¡¡¡25!!!

Me siento como una mujer nueva. Siento que renací. Siento que tengo una vida por delante llena de desafíos y porsupuesto: logros. El 8 de octubre que recién pasó cumplí 25 años, un cuarto de siglo.

Todos me decían, "estamos más vieja ¡¡ahh!!" y sólo podía afirmarlo con una sonrisa. Me gustan los 25, te dan ese dejo de responsabilidad y madurez justas, necesarias para ser toda una mujer, pero deseable, una mujer independiente y con ganas de seguir siéndolo, al menos por un tiempo más.

Mi hermano, que tiene 16 me dijo que "estaba en la cuenta regresiva", mi hija me dijo "¡mamá ya eres adulta!", pero tengo la impresión de que no fue con convicción, porque ella es mucho más "responsable" que yo en muchos aspectos. Ella es la que me reta a mí, la que acomoda mi ropa cuando me visto y me recuerda las cosas que tengo que hacer porque si hay alguien que necesita de las agendas, ¡esa soy yo!. !AHHH! Nada mejor que un planner para mí.

Esteeeeeeeem jaja sí, así soy yo, a terrible mess, pero tengo gente que me quiere justamente por eso.

A los 25 años, me soprende la aceptación que tengo, tanto de los defectos como de las virtudes. Aprendí a convivir con ellos tan gratamente, que echaría de menos si alguno de ellos me faltase.

Es un gusto ser irresponsable, porque ese "defecto", te otorga placer al momento que dejas la rutina y te embarcas en alguna aventura que no estaba presupuestada...¡Total!, siempre hay tiempo para terminar las obligaciones ¿no?

He tenido tanto trabajo últimamente, que no pude escribir antes. Ni siquiera pude ir a Viña para el Matrimonio top de la Lore. Anyway...parece que después de todo, sí soy responsable para algunas cosas y no es sólo el "efecto óptico de los 25".