Tonta, liviana y sin sustancia

Me fui. Estuve desaparecida más de un mes y me hacía falta. Muchas personas creen que al estar inmersas en la vorágine de la sociedad logran pertenecer: yo pienso todo lo contrario.

Necesito tomar aire y distancia, salirme de este mundo con un sistema tan malvado, pero del que no puedes escapar, para mirar hacia dentro, hurgar dentro mío y tomar conciencia de mi ser.

Roberto Matta, en una de sus últimas entrevistas hizo énfasis en que hay dos tipos de personas: las que se ocupan del haber y otras del ser. Creo que yo soy parte del segundo grupo, pero no puedo dejar de pensar en el primero, porque si no me hago cargo de él, no tendría la estabilidad para poder elevarme y mirar desde de la tranquilidad que da la profesión, el trabajo y por consecuencia, el estrés.

Si tuviera que caricaturizar mi estado, me pondría una túnica blanca y me sentaría en posición de yoga, meditando y….Oooooohhhhmmmmmmm.

Veo en mi ausencia que hay personas que me encuentran fome: Diré algo…he visto tanto ego en los blogs, tantas palabras que intentan ser inteligentes, pero que no dicen nada, que creo que otra bitácora pretenciosa no es necesaria. Ya tienen muchas para leer. Sólo pretendo escribir tonterías para despejarme y poder liberar alguna tensión que me molesta. (Honestamente, nunca creí que alguien me leería)

No escribiré nunca un post intelectual, esos que hablan de corrientes literarias, filosóficas y que los mezclan con actualidad e historia, descritos con palabras retorcidas y rebuscadas, que en vez de denotar inteligencia, (verbigracia jaja) te dejan mirando la pantalla del computador media ladeada y sin entender lo que realmente te quiso explicar el autor.

Me gustan las tonteras…me gusta lo vacío y vano. Yo quiero escribir sobre estupideces…It’s my pregorrative…

Digo esto, y me pongo en riesgo de ser considerada, tonta, liviana y sin sustancia…pero creo que luego de mi temporada de “NO SER”, nada me importa…